Germinar semillas de marihuana

EL PROCESO

Germinar semillas de marihuana es un proceso sencillo que requiere de muy pocos materiales y las técnicas más básicas. Cualquier jardinero, independientemente de su experiencia, debería poder dominar la germinación de semillas de marihuana siguiendo este método sencillo y fiable.

Esto es lo que necesitarás

1. Humedezca dos toallas de papel limpias con agua filtrada o destilada. Las toallas deben estar bien empapadas pero sin que gotee exceso de agua. Coloque las dos toallas mojadas superpuestas sobre los platos limpios.

2. Coloque las semillas encima de las toallas de papel mojadas y asegúrese de dejar una separación de al menos 2.5 cm (una pulgada) entre sí en la toalla.

3. Cubre las semillas con dos toallas de papel más que hayas remojado tal como lo hiciste con la primera capa de toallas. Coloque el segundo plato volcado encima del primer plato. Esto debería crear una cúpula entre las dos placas. Asegúrese de que la placa superior no esté presionando directamente las semillas.

4. Coloque los platos en un lugar limpio y cálido entre 70 y 90 grados Fahrenheit (21 y 32 grados Celsius). Encima del frigorífico suele ser un lugar ideal para ello. A Estera térmica para plántulasir?t=growshop0d 20&l=am2&o=1&a=B016MKY7C8  diseñado específicamente para mantener calientes las nuevas plántulas es una opción aún mejor.

5. Ahora toca esperar. Algunas de las semillas más vigorosas se abrirán en menos de 24 horas, mientras que otras pueden tardar varios días en abrirse. Revisa las semillas diariamente y asegúrate de que las toallas de papel permanezcan húmedas. Una botella con atomizador funciona bien para volver a humedecer las toallas de papel si es necesario.

La semilla ha germinado una vez que se abre y se hace visible una pequeña raíz pivotante que crece a partir de la semilla. Esta raíz principal germinada es el sistema de raíces inicial de la planta de cannabis. Tenga cuidado de no manipular demasiado ni contaminar la semilla que está brotando en esta etapa.

Ahora es el momento de transferir cada una de las semillas germinadas a sus propios medios de cultivo. Asegúrese de que la tierra no esté demasiado densa y haga un pequeño agujero en la superficie de la tierra con un lápiz o el dedo. El agujero debe tener aproximadamente un cuarto de pulgada (75 cm) de profundidad. Coloque con cuidado la semilla germinada, con la raíz germinada apuntando hacia abajo, en el agujero y luego cúbrala suavemente con tierra. Humedece la tierra con un atomizador pero ten cuidado de no ahogarla. La semilla necesita agua para crecer, pero demasiada agua la asfixiará.

Devuelve la semilla en maceta a un ambiente cálido y espera. En unos pocos días, la planta joven debería atravesar la superficie del suelo y debería aparecer el primer conjunto de hojas, estas nuevas hojas se llaman cotiledones.

Ahora la planta está lista para ser colocada bajo la luz y comenzar el crecimiento vegetativo. Las bombillas fluorescentes T5 son una buena opción para esta etapa, ya que no estresarán ni sobrecalentarán la planta joven.